Las personas son lo que uno quiere que sean

Las personas no son así porque lo sean objetivamente, lo son porque nosotros mismos queremos que lo sean.

Ya sé que suena un poco raro, pero de un tiempo a esta parte, tengo este pensamiento. Las personas no nos afectan de manera objetiva. Todos tenemos una opinión sobre el resto y nos hacen sentir de una u otra manera.

¿Y para qué? Muy sencillo, las relaciones humanas tienen que ser siempre sinceras y totales, es decir, de nada sirven medias tintas ni nadar y guardar la ropa, o te involucras o no y es mejor involucrarte al máximo. Siempre hay que entregarse totalmente a las personas que te rodean, amigos, pareja, familia,… Con este planteamiento, uno se vuelve más vulnerable ante los demás, ya que al dar lo máximo, uno puede no verse correspondido del todo, o ser traicionado ante un giro inesperado de la relación. Ante esa situación, y ya sé que esto sonará un poco frío, conviene pensar que las personas no son maravillosas, porque lo sean por si mismas, sino porque nosotros pensamos que son así.

De esa manera, y ante esa situación, tenemos que hacernos fuertes y plantear que esos sentimientos que uno tiene sobre esa persona, tú eres el único que lo manejas y que debes cambiar para poder pasar página y descubrir nuevas personas,…

Hay una parte de la canción Deseo de Pedro Guerra que me encanta y que quizás resume estas ideas:


" /…/
y con las luces del alba antes que tú te despiertes
se hará ceniza el deseo me marcharé para siempre

y cuando todo se acabe y se hagan polvo las hadas
no habré sabido por qué me he vuelto loco por nada"


Por cierto, que bonita canción.


Salu2 y cuídate.