Las travesuras de la niña mala.
En el post anterior me tomé la libertad de “tomar prestada” un trozo de de la imagen de la portada de uno de los últimos libros que he leído. En la imagen se ve la mano de una persona con un bolígrafo roller Mont-blanc sentado en un café parisino escribiendo, …¿palabras de amor?, delante de la catedral de Notre Dame de Paris.
Se trata de “Las travesuras de las niña mala”, de Mario Vargas Llosa. La última novela del escritor hasta la fecha.
El libro narra las aventuras aunque son más bien desventuras de Ricardito Somocurcio a lo largo de su vida, por el hecho de estar profundamente enamorado de su chilenita.
Sin entrar en el argumento, sólo diré que Vargas Llosa nos deleita con su prosa entretenida y directa a lo largo de varias épocas de los últimos cincuenta años, en varios lugares del mundo, mezclando narración de situaciones políticas, sociales y personales acompañando la historia de amor.
El amor protagonista hacia su amada le hace padecer y disfrutar, le condiciona su vida, pero lo que es más importante, le hace sentirse vivo y notar correr la sangre de sus venas por su interior.
Quiero agradecer a Vargas Llosa por trabajo, desde mi humilde rincón, que tantos buenos momentos me ha hecho pasar con este libro y otros, y que durante la lectura a veces uno se ponía en la piel del enamorado Ricardito.
Un abrazo y cuídate.
PD: Tengo una amiga que ha coincidido que lo está leyendo, espero que te guste y le entretenga tanto como a mi.